Ayuda

  Decidí seguir por el camino que llevaba al pueblo, era lo más seguro y no quería arriesgarme. Corrí, no podía dejar que me alcanzaran. Por suerte no había mucho trecho de aquí al pueblo, así que llegué pronto.
  Me dirigí al ayuntamiento, o hacia donde yo pensaba que estaría, escondiéndome en cuanto oía pasos. Pregunté a un par de personas sobre dónde estaba, hasta que por fin lo encontré.

  -Perdone -le dije a una mujer que había en el mostrador-, necesito ayuda.
  La mujer frunció el ceño, algo desconfiada.
  -¿Qué te ocurre? -me preguntó.
  -Mis padres quieren llevarme a un internado porque no me quieren, quieren librarse de mí -en cuanto lo dije me di cuenta de lo estúpido que era, lo estúpida que era la idea de que podrían ayudarme. Aun así, me enfadé cuando la mujer soltó una risita.
  -Lo siento, no podemos hacer nada por ti -se le notaba que se estaba aguantando la risa. Vale que fuera estúpido pero, ¿era necesario reírse de mí?
  -¡A mí no me hace gracia! ¡Vete a tomar por culo, tú y todo el sistema de gobierno de este estúpido país! -le grité, y me fui, dejándola estupefacta. Lo cierto es que la escena era bastante divertida.
  Caminé por el pueblo, resignada. No sabía qué hacer.
  Por eso, cuando vi a mis padres buscándome, no huí de ellos. ¿Qué podían decirme que empeorara aun más la situación en la que me encontraba?

*********************************************************************************

  Dirígete a "Superdotada".

No hay comentarios:

Publicar un comentario